martes, 13 de abril de 2010

Trail running / 13-04-10 / ¡Que mala suerrrte chatos!

Pues sí, para el que no se haya dado cuenta, hoy es martes y 13. Y por lo visto hoy, la superstición se ha cumplido.

Salimos al mediodía a corretear por Collserola Maestro Sensei, Maraton Man, Mulay, Blues Brother y yo. Vamos a hacer un altiplano, Mortirolo Plus, Tourmalet y T1.

Yo hace 10 días que no corro, Blues Brother también hace tiempo que no sale, pero Maestro y Mulay no tienen piedad e imponen un ritmo despiadado. Maraton Man hace esfuerzos para no descolgarse mucho.

Todo va bien hasta que Pepe Gáfez hace acto de presencia por primera vez: Mulay tropieza con los cordones demasiado largos de sus Saucony y da con sus huesos en tierra, con la consecuencia de un pequeño hematoma.


¡QUE MALA SUERRRTE CHATO! (En serio, eh)


Nos paramos a auxiliarle. Maraton Man que viene retrasado, al llegar a nuestra altura, se interesa brevemente por Mulay pero rápidamente sigue su marcha dejándonos allí tirados. Maestro le recrimina su fea acción acusándole de usar la "táctica réflex". Más tarde Blues Brother definiría esa conducta como la "táctica apañó" (cuando pueden te la clavan).





Maraton Man se excusa diciéndonos que ya lo pillaremos, como así sucede en el altiplano. A partir de aquí nos reagrupamos y, mas o menos, vamos juntos el resto del recorrido.

Queda el último obstáculo, la subida a La Mola. En el inicio, observo que Maestro y Blues Brother, se sitúan en cabeza y empiezan a tramar algo en mi contra. Cuchichean con miradas esquivas hacia atrás, buscándome. Les digo que hoy no tienen nada que temer, que no estoy en condiciones de atacar subiendo La Mola. Aún así, no se relajan y van tapándome todos los huecos del lado bueno de la curva. Yo no estoy en mi mejor momento, pero me guardo un "piñón" (argot ciclista) por si surge la ocasión. Incluso fuerzo un poco la respiración para que Maestro se confíe.

Y la ocasión surge. Pepe Gáfez hace acto de presencia por segunda vez: Aparece un tractor que baja por el camino ocupando la mayor parte de él. Maestro no tiene más remedio que apartarse un poco con lo cual, involuntariamente, me deja el espacio suficiente para atacarle por el lado malo del camino. Salgo a todo lo que dan mis piernas vigilando mi espalda por si Maestro arranca, pero se ha quedado helado con mi ataque y renuncia a la persecución.


¡QUE MALA SUERRRTE CHATO! (No es en serio)

Distancia: 10'5 kms aprox.
Tiempo: 53'
Rencillas: Unas pocas. ¡Mañana, más!

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